Buscando culpables

Para nadie es un secreto que las maniobras al interior del partido MORENA en Puebla sólo tienen un destino: el fracaso total del ejercicio electoral 2021, por la ola de imposiciones que han perpetrado el dúo conformado por Edgar Garmendia y Carlos Evangelista, con los resultados desastrosos que todos los poblanos hemos visto; campañas flojas, candidaturas vulnerables, candidatos provenientes del PRI y del PAN, la sede partidista tomada, el instituto estatal electoral igualmente, para lo cual; los verdaderos perpetradores de la operación partidista, están buscando culpables, pues ya se dieron cuenta que pueden ser duramente señalados desde la 4T.

Por principio hay que decir que la fallida idea tiene un solo propósito: Culpar a Miguel Barbosa lo que por propia mano han hecho; para lo cual, han empezado a idear una campaña de desprestigio contra el gobernador del estado con un ingrediente increíble: el engaño multi-publicitado con el fin de tirarle la viga al gobernador, lo que fue perpetrado desde la ciudad de México y con la anuencia de Mario Delgado; pues alguien tiene que pagar los platos rotos…

Hay que decir que el plan es este:

1.-a medida que vayan avanzando las campañas, si están van mal (que ya se ve que así va a ser…), los facinerosos irán aumentando las menciones negativas contra el gobernador.

2.-aunado a ello, los reclamos por la falta de operación del gobernador irán igualmente en aumento, pidiendo un castigo por tales hechos; al tiempo de lo anterior, irán sembrando la idea de la destitución del ejecutivo estatal, pese a que no lo dejaron meter las manos, y pese a que Edgar Garmendia Y Carlos Evangelista, los empleados de quienes hicieron todo esto, fueron los verdaderos culpables al imponer por la vía de la arbitrariedad pura, con la complacencia y participación de la dirigencia nacional, y en especial, de Eloísa Vivanco; a una bola de tarados en su gran mayoría, que van directo al fracaso.

3.-luego de ver una inminente derrota, los reclamos nuevamente aumentarán; el fin es pedir la destitución del ejecutivo estatal, para que de ser posible inmediatamente después de conocerse los resultados electorales y de no ser favorables, generar un coro reprobador de todos los actores involucrados en las componendas, para culpar a Luis Miguel Barbosa Huerta del fracaso.

4.-tratar de hacer de esto la tumba política de Miguel Barbosa Huerta, ni más, ni menos…
Con lo ya mencionado, cabe destacar que no es posible que algo así la gente pueda creer, pues los verdaderos culpables han dejado muchas huellas de sus tonterías, de sus desaciertos, de sus abusos y de sus mentiras.

Es importante destacar que:

a). – el culpable no es el gobernador de Puebla Miguel Barbosa Huerta, los culpables visibles son Edgar Garmendia, Carlos Evangelista, Eloísa Vivanco y Mario Delgado por hacerles caso de sus tonterías.

b). – lo de la “destitución” es un ardid que viene desde el senado, es un acto desesperado por endilgar la culpa de lo sucedido al gobernador, cuando los actores principales de las acciones fallidas, buscan esconder la cabeza como avestruz, para no dar la cara ante los problemas generados.

c). -luego de su plan trazado, los involucrados pretenden hacerse de la gubernatura, y realizar un reparto, como si botín de guerra fuera, con las pingües ganancias de patrimonio político logradas en esta reyerta.

Es muy importante aclarar que en una disputa, nadie gana… todos pierden, y un fracaso lo van a cargar todos en MORENA, no nada más el gobernador, puesto que hay un informe de la secretaría de gobernación federal en el escritorio de Andrés Manuel López Obrador, y el presidente de México ya sabe quienes son los culpables, más les valdría hacer todo lo posible por ganar Puebla, Tepeaca, Ciudad Serdán, Cholula, Atlixco y Acatlán de Osorio que están más que perdidos; pues de lo contrario, habrá un alcaldesa destituida y con cargos penales, y un senador bajado de las más importantes carteras del senado, si no hacen una eficiente operación cicatriz, que no incluyen a René Sánchez Galindo, ni a Javier Sánchez Galicia.

Finalmente, por el contrario, basta decir que la militancia les va a voltear la espalda si creen que todavía les sirven de algo Garmendia y Evangelista, pues sólo ellos creyeron que podían hacer las cosas a su antojo, sin consultarlo con nadie.