Marcos Guevara 
Tremendo se encuentro de fútbol el que se vivió la noche de ayer en el Cuauhtémoc, pues hubo goles y golazos, seis en total, algo poco común en los encuentros del Puebla de la Franja que ha sido sumamente cuestionado por su manera tan defensiva de jugar y por su poca regularidad.
Desde el silbatazo inicial el encuentro camoteró demostró que quería los tres puntos, mismos que se ponían en el bolsillo de la mano del paraguayo Osvaldo Martínez, quien se encargó de abrir el marcador con un gol al ángulo; sin embargo, apenas 63 segundos después Ángel Sepúlveda consiguió igualar el resultado.
Previo al descanso, la dupla uruguaya salió a relucir en el conjunto de los Gallos Blancos, pues Kevin Ramírez puso la asistencia para que su compatriota Sebastián Sosa se estrenara como goleador en la Liga MX al anotar el tanto que les puso en ventaja.
Una ves frescas las piernas tras quince minutos de descanso, Omar Islas vacunaba nuevamente al Puebla que ya perdía 3-1.
Las cosas se ponían color de hormiga para la escuadra comandada por Reynoso, técnico cuestionado y amado por unos, odiados por otros; incluso, los fanáticos más radicales ya querían que su nombre desapareciera del cuadro de la Angelópolis.
Sin embargo, con la camiseta por delante y a base de pundonor, el 11 poblano logró acercarse al marcador con un señor golazo de uno de los mejores jugadores enfranjados, Brayan Angulo, quien con un zapatazo de derecha venció al portero gallo.
A minutos de terminar el encuentro y cuando el cuadro queretano se saboreaba el triunfo, un tiro potente de Christian Tabó les arrebató la sonrisa, dando así el empate definitivo, con sabor a triunfo, a los de casa.
