Saúl Hernández 
*El actor que encarnó físicamente al icónico muñeco diabólico murió en Los Ángeles, dejando tras de sí una carrera de culto en el cine de terror.
El cine de terror perdió a una de sus figuras más peculiares y entrañables. Ed Gale, actor recordado por interpretar a ‘Chucky’ en varias de las primeras entregas de la saga El muñeco diabólico, falleció el pasado martes 27 de mayo a los 61 años, según confirmaron medios estadounidenses y su sobrina a través de redes sociales.
La muerte del actor se produjo en un hospital de Los Ángeles, California. Aunque las causas exactas aún no han sido confirmadas, su partida deja un vacío entre los fanáticos del cine de género, donde Gale fue mucho más que un actor: fue una figura clave para dar vida a uno de los villanos más temidos de la gran pantalla.
Con una estatura de apenas 1,02 metros, Gale aportó la dimensión física del muñeco asesino en las escenas más complejas de las películas, convirtiéndose en el verdadero cuerpo detrás de la marioneta maldita. Pero su talento no se limitó a eso: también participó en otros filmes de culto como Howard, el pato y Chopper Chicks in Zombietown, consolidando una carrera marcada por la versatilidad y el carisma.
Su sobrina, Kayse Gale, le dedicó un emotivo y humorístico homenaje en Facebook, donde recordó la determinación de su tío desde sus inicios. “Se fue a California haciendo dedo con 41 dólares y un sueño, y nunca miró atrás”, escribió. Con esa misma determinación, Ed se abrió camino en Hollywood, convirtiéndose en una figura querida tanto por colegas como por los fans.
“Con el corazón encogido anunciamos el repentino fallecimiento de nuestro tío, que ha hecho su última reverencia y ahora es cabeza de cartel en el más allá”, expresó Kayse en una despedida que mezcla tristeza, orgullo y el mismo espíritu con el que su tío vivió su carrera.
Hoy, mientras las luces del cine se apagan en señal de duelo, el terror rinde homenaje a una de sus estrellas menos visibles, pero más inolvidables. Ed Gale ya no está, pero su legado seguirá acechando en cada pasillo oscuro donde el eco de ‘Chucky’ aún susurra.
